Condiciónate al Éxito Con PNL!

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Condiciónate al Éxito Con PNL!

Si quieres convertir un sueño en realidad, con la PNL (Programación Neurolingüística) puedes aprender a condicionarte al éxito, a realizar ciertas acciones, a seguir estrategias específicas y puntuales; a trabajar más con el cerebro y las neuroasociaciones.

Como se ha mencionado anteriormente, en la Neurolingüística el término “programación” indica que el cerebro es como una computadora en la que se ejecutan ciertos programas y “software”.

Estos “programas” son, en cierto sentido, modelos que influyen en la forma en que reaccionamos ante las situaciones. Por ejemplo, una persona con una actitud grosera nos pone nerviosos.

La PNL ha estudiado el funcionamiento de estos programas, de los hábitos aprendidos o innatos, y ha enumerado estrategias para crear nuevos hábitos que van en la dirección elegida.

Una dirección que no se atribuye por casualidad o por la propia cultura ni tampoco por los condicionamientos de tus padres o maestros, sino que se estableció por tu propia elección.

La definición que Anthony Robbins (el experto y conferencista mundial de PNL) le da a su técnica recuerda a la de la Programación Neurolingüística, pero en realidad se llama Condicionamiento Neuroasociativo (CNA).

El acrónimo es diferente por razones de mercadeo y para evitar el malentendido que puede llevar al uso del término “programación”. El episodio que te voy a contar te ayudará a entender por qué

Anthony Robbins y un cliente fumador

Un día, durante un curso, una persona se acerca a Robbins y le dice: “Oye Robbins, ¿te acuerdas de mí?”

Y él responde: “Bueno, ahora no, ya sabes, entrené con 50 millones de personas, honestamente. No te recuerdo “.

Y el otro: “Hice una terapia de fumar contigo, y me ayudó a dejar de fumar, pero tengo que decirte que fracasaste”. “¿De qué manera he fallado?”, dice Robbins . “Déjame entender la situación. ¿Hiciste esta terapia de humo conmigo, cuántos paquetes fumabas? “

” Cuatro paquetes por día “. Y Robbins:” Ah, ¿cuánto tiempo has dejado de fumar? ” “Bueno, lo dejé por un año y medio / dos años. Pero luego tuve un problema y volví a fumar; ahora fumo cuatro paquetes por día”.

” ¿Me estás diciendo que fumabas cuatro paquetes por día, luego solo tuviste una sesión de una hora conmigo, dejaste de fumar por dos años y fallé? ”

El otro responde: “Sí, has fallado porque me has programado mal”.

Desde entonces, Robbins ha reflexionado sobre el incidente y, especialmente, sobre el malentendido derivado del uso del término “programación”, cuya metáfora no indica que las personas puedan ser “programadas” por sus instructores, pero se refiere, como dije hace un momento, a los programas, a los hábitos, a los patrones que se ejecutan en la mente.

Por esta razón, Robbins ha optado por utilizar otra metodología que enfatiza el hecho de que no “programa” a las personas, sino que les proporciona las herramientas para condicionarse, ayudándoles a encontrar o buscar motivación… La responsabilidad por el éxito o el fracaso es, sin embargo, de ambos.

Garantiza sus herramientas, sin duda las mejores, las más efectivas y rápidas, pero le corresponde al cliente continuar su viaje con compromiso.

El término “condicionamiento” indica que debe haber una responsabilidad compartida entre el entrenador y el cliente; como sucede, por ejemplo, entre el entrenador y el equipo de fútbol. No puedes esperar que el entrenador  por sí solo haga ganar un campeonato a su equipo.

 Su compromiso no es suficiente. Puede motivar al equipo, extraer los mejores recursos de la gente, proporcionar estrategias, esquemas de juego, pero luego los jugadores deben jugar los juegos siguiendo sus instrucciones.

Es decir, la responsabilidad debe ser asumida por ambos. El entrenador, el coach, el facilitador o quien quiera que sea, necesita del accionar y compromiso de su equipo o su cliente, para que los resultados sean los deseados.

De la misma manera que un entrenador, puedo motivarte, enseñarte estrategias, sugerirte cómo actuar, pero luego, a partir de mañana, te toca atí comprometerte y condicionarte para el éxito, tomar veinte minutos por semana o al día, esto lo decidirás tú. , para planificar tus metas.

El condicionamiento para el éxito comienza con el entrenamiento, incorporar los recursos de la PNL, aprender, capacitarse (profesores, coachs, facilitadores) en cursos, talleres, sesiones de coaching, etc. , pero en definitiva será el estudiante el que luego deberá continuar el condicionamiento a través del tiempo, para alcanzar su meta de forma efectiva!.

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